Con la llegada del verano disfrutamos de más horas de sol al día. Contar con días más largos tiene muchas ventajas, como poderlos disfrutar en la playa o en la piscina o alargar nuestro ocio hasta entrada la noche. Sin embargo, esto también tiene varios inconvenientes, especialmente al volante. El calor hace que estemos incómodos o que notemos antes la fatiga, pero también provoca un problema que puede ser grave: los deslumbramientos al conducir.

Según la Dirección General de Tráfico (DGT), 5 de cada 100 accidentes de tráfico en España ocurren por este motivo, especialmente al amanecer o al atardecer. El sol reflejado en nuestros ojos provoca que nuestra pupila se contraiga, por lo que la visión se pierde momentáneamente. Esto puede hacer que, a una velocidad de 120 km/h, recorramos completamente ciegos un total de 165 metros en tan solo 5 segundos. Todo un peligro.

Por eso, en HR Motor os damos varios consejos para evitar deslumbramientos al conducir. Cumplir con estas recomendaciones hará que podamos reducir estas peligrosas situaciones, fortaleciendo nuestra seguridad al volante.

 

Consejos para evitar deslumbramientos al conducir

 

Utiliza gafas de sol

En todas las estaciones, y especialmente en verano, es aconsejable llevar gafas de sol en el coche. Son especialmente recomendables las polarizadas y con cristales de color azulado. Este complemento evita los deslumbramientos, especialmente cuando se conduce con sol de cara. Pero cuidado: deja de usarlas cuando ya anochezca o si atraviesas un túnel, ya que te reducirá considerablemente la visión.

 

Deja el parasol para situaciones puntuales

Es lo primero que hacen muchos conductores cuando el sol les deslumbra: colocar la visera parasol. No obstante, si contamos con gafas de sol este elemento del vehículo no es tan necesario. Solo es recomendable en casos de gran deslumbramiento, tanto frontal como lateral, ya que reduce considerablemente nuestro campo de visión.

 

Mantén los cristales limpios

El sol no engaña. Al igual que notas tu coche más sucio en el exterior cuando hace sol, cuando deslumbra también revela que la luna del vehículo, tanto por fuera como por dentro, está sucia. Por ello, mantener los cristales limpios es uno de los consejos para evitar deslumbramientos al conducir, ya que, a contraluz, la suciedad multiplica el efecto del sol. Las manchas se convierten en nuestras enemigas y minimizan nuestra visión, por lo que la limpieza, en este caso, no es algo meramente estético.

 

Realiza paradas de forma frecuente

Al igual que ocurre con nuestra piel, los ojos también se cansan tras una exposición prolongada al sol. La fatiga visual (visión borrosa, ojos cansados, irritación o lagrimeo son algunos de sus síntomas) se hace patente tras varias horas conduciendo. Y es una afección que empeora con la edad, determinadas enfermedades, el alcohol, las drogas o algunos medicamentos. Para evitarla, debemos realizar paradas frecuentes.

 

Modera la velocidad

Una recomendación que vale para cualquier contratiempo que pueda surgir. En este caso, si tu visibilidad se ve afectada por un deslumbramiento, circula más despacio. Esto hará que no recorras tantos metros con poca visión, y que en caso de tener algún accidente esta sea más leve, ya que la combinación de exceso de velocidad y visibilidad reducida pueda traducirse en un grave accidente.

 

Otras situaciones de deslumbramiento al conducir

En túneles

Tanto al atravesar túneles como tramos con escasa visibilidad, especialmente en carreteras con un único carril por sentido, podemos sufrir un fogonazo de luz al salir. En ese caso, es aconsejable utilizar gafas de sol o la visera parasol para atenuar el impacto lumínico. Además, deberás moderar tu velocidad y respetar la distancia de seguridad para aumentar la seguridad.

 

Con luces de largo alcance

En carretera y de noche, ten cuidado con utilizar las luces de largo alcance. Si un coche viene de frente, cambiarlas por la de corto para evitar deslumbrar al resto de conductores. Haz lo mismo con los peatones.

 

De noche

Cuando no hay mucha iluminación, ya sea natural o artificial, crecen las opciones de ser deslumbrado, aunque sea con luces cortas. En ese caso, no mires a la fuente de luz y usa las líneas de la carretera como tus guías: mantente cerca del límite derecho de la vía y no tendrás ningún problema.

 

Si hay reflejos

No solo hay deslumbramientos por el sol o los focos de otros vehículos: también por reflejos en edicios, lunas, y otros elementos que utilicen cristal. En este caso, ten cerca las gafas de sol o coloca rápidamente la visera parasol.

 

Por la espalda

Siguiendo el ejemplo anterior, los retrovisores también son un punto en el que podemos sufrir reflejos por parte de los vehículos que circulas detrás nuestra, pero también del sol. En ese caso no muevas los retrovisores, ya que cuando acabe el deslumbramiento carecerás de visión trasera. Simplemente ponte las gafas de sol.